Chargers 23-30 Ravens
Algo de lo que nos deja la derrota frente a Baltimore en Monday Night:
No Hay Tiempo de Lamentos, Sino de Preparar el Viaje a Atlanta
Se cayĂł ante un buen equipo y se cortĂł la racha de cuatro victorias al hilo. Pero para los que estĂĄn esperando que esto descarrile a Chargers (7-4) de su objetivo, no tenemos buenas noticias.
Después de un inicio demoledor con nueve jugadas para 70 yardas que terminó en un TD de cinco yardas por tierra de Justin Herbert, el equipo batalló para volver a encontrar ese funcionamiento mostrado en la primera serie ofensiva del partido.
De hecho, el segundo TD no llegarĂa sino hasta el final del encuentro por una carrera de una yarda de Gus Edwards.
"Creo que hicimos un buen trabajo moviendo la pelota, sólo tenemos que seguir anotando puntos," dijo Herbert después del partido.
Mucho afectĂł la salida de J.K. Dobbins en el primer cuarto (por un problema en su rodilla). El equipo tuvo que cambiar su tĂĄctica en el ataque terrestre, pero es la NFL. Hay que estar listos para hacer los ajustes necesarios durante el partido.
"J.K. es un corredor dinĂĄmico. Perderlo definitivamente duele... cuando pierdes a un jugador tan bueno, definitivamente lo sientes un poco," dijo Zion Johnson.
Los Chargers se fueron arriba 10-0 antes de que Lamar Jackson y compañĂa comenzaran a entrar en calor, lo que ocurriĂł con menos de cuatro minutos por jugar en el segundo cuarto con una carrera de 10 yardas para el dos veces MVP de la liga, de ahĂ en mĂĄs, Baltimore anotĂł 30 puntos sin respuesta por parte de Chargers.
Es un buen equipo el de los Ravens. Con una identidad clara producto de un sistema que tiene en John Harbaugh a su entrenador por 16 años y contando (solo Mike Tomlin en Pittsburgh tiene mås tiempo como head coach en una franquicia NFL) y que ya ganó un Super Bowl bajo su mandato.
Es lo que quieren los Chargers con Jim Harbaugh. Establecer una cultura y una identidad que les permita ser contendientes todos los años. Eso no se construye de la noche a la mañana, pero estå claro que los del rayo van por buen camino.
Ahora lo importante es recuperarse en semana corta y preparar el viaje a Atlanta, donde los estarĂĄn esperando unos Falcons descansados tras su semana bye, tratando de revertir lo que fueron sus Ășltimos dos partidos (derrotas ante New Orleans y una paliza en Denver). Es ahora cuando se ve la fortaleza interna del vestidor.
"Este equipo ha perdido antes y nos han visto recuperarnos. Eso es lo que vamos a hacer," dijo Daiyan Henley. "No importa si es una semana corta o larga. Queremos terminar bien. No queremos sentir mås esta sensación. Pueden apostar a que nos prepararemos mås duro, mejor, seremos mås sólidos técnicamente durante esta semana y trataremos de ser mejores."
Derwin James, Jr. agregĂł: "Los hombres en este vestidor van a responder."
Gran Partido de Derrick Henry
Se sabĂa lo que era Baltimore. Si bien les habĂa costado mucho correr el ovoide en su derrota ante Steelers, un equipo que tiene una identidad clara no renuncia a ella porque las cosas no resultaron en un partido. En dos noches seguidas el SoFi vio exhibiciones de los corredores que lideran la NFL.
Derrick Henry terminĂł el partido con 24 acarreos para 140 yardas y ya pasĂł la barrera de las 1,300 yardas para la temporada. Aun asĂ, Khalil Mack solo piensa en la oportunidad de volver a enfrentar a estos Ravens.
"Por mi forma de jugar al fĂștbol, ââme encantarĂa volver a jugar contra este equipo," dijo Mack. "Me encantarĂa. Pero lo que vimos hoy en la video no fue lo suficientemente bueno."
El numero 22 fue un problema insoluble para la defensa del rayo y se hizo mĂĄs fuerte a medida que avanzaba el partido. Fue tal el dominio que aunque Lamar Jackson solo corriĂł para 15 yardas los Ravens terminaron con 212 yardas en 37 acarreos (ayudados por el TD de 51 yardas de Justice Hill que cerrĂł el partido en el Ășltimo cuarto).
"Creo que hubo muchas situaciones en las que tuvimos que salir de nuestros bloqueos y jugar un poco mejor con nuestras manos," dijo Mack.
Harbaugh dijo: "Corrieron muy bien el balón. Necesitåbamos una mejor destrucción de bloqueos, ya sabes, en todos los aspectos. Pero hay que reconocerles el mérito."
Por este dominio terrestre, Jackson pudo jugar un partido muy eficiente por aire completando 16/22 para 177 yardas, dos TDs y un QB rating de 126.5 (su conexiĂłn de 40 yardas con Rashod Bateman al cierre del segundo cuarto cambiĂł el partido). Uno de los mayores problemas para la defensa coordinada por Jesse Minter, fue que Baltimore fue muy efectivo en sus primeras dos oportunidades de avance, y eso los dejĂł en situaciones de tercera y corto durante gran parte del encuentro.
"Yo dirĂa que en el primer intento, permitiĂ©ndoles avanzar ocho yardas y entrar en segunda y dos, tercera y uno," dijo James. "Simplemente crea mĂĄs espacio para la explosiĂłn porque ahora estĂĄs preparando la carrera y el pase en esas situaciones cortas. Simplemente tenemos que ser mejor."
De hecho, terminaron ocho de 15 en terceras oportunidades (varias de ellas tercera y una o tercera y 2) y eso también les dio confianza para ir por las cuartas oportunidades y una, donde terminaron tres de tres.
Henry abriĂł el segundo cuarto con carreras de 19, 14 y 11, lo que sentĂł las bases de lo que serĂa el resto del partido. Baltimore dominĂł la lĂnea de contacto y cuando quisieron correr casi siempre se salieron con la suya.
"Es un buen equipo, es una buena ofensiva. Sabemos lo que tenĂan en su backfield", dijo Henley. "Realmente todo se redujo a la tĂ©cnica.
"Simplemente siendo uno de los muchachos de la defensa, siento que como unidad podrĂamos haber jugado mejor en el frente," agregĂł Henley. "Siento que es uno de esos juegos en los que tengo que dar un paso al frente y ser mejor. Como defensa, siento que todos podrĂamos ser mejores."
La Confianza EstĂĄ Intacta
El tiempo de posesiĂłn fue prĂĄcticamente el mismo. 30:57 para Ravens, 29:03 para Chargers. Ambos equipos tuvieron 60 jugadas cada uno. Ambos equipos tuvieron 19 conversiones de primeras oportunidades.
Pero Baltimore amasĂł 389 yardas contra 285 de Chargers, en la misma cantidad de jugadas. Obviamente que perder a J.K. Dobbins fue importante. En apenas seis acarreos antes de salir de la cancha, Dobbins corriĂł para 40 yardas ademĂĄs de agregar 19 yardas por aire. El equipo corriĂł para 76 yardas en 15 acarreos en la primera mitad con Dobbins en cancha.
En el segundo tiempo Chargers corrió para siete yardas en cinco intentos. Eso impacta. Tienes que cambiar por completo tu forma de atacar. El ritmo ofensivo fue alterado. Pero también hubo oportunidades de atacar por aire a una secundaria que llegaba a Inglewood con muchos cuestionamientos.
Ladd McConkey volviĂł a liderar a los receptores con 83 yardas en seis recepciones, pero como ofensiva seguramente querrĂĄn tener un par de jugadas de vuelta. Ante ciertos equipos te puedes dar ese lujo, pero ante rivales de la categorĂa de Ravens y el dos veces MVP de la NFL, lo terminarĂĄs pagando.
Las jugadas se tienen que hacer cuando tienes la oportunidad. Pese a que los nĂșmeros en frĂo tal vez no lo indiquen (21/36 para 218 con su QB rating mĂĄs bajo de la temporada, 75.9) Herbert volviĂł a jugar un partido excepcional, completando un par de pases de alto nivel de dificultad y con posibilidad de mĂĄs que seguramente estarĂamos hablando de TDs, 300+ yardas y tal vez hasta de otro resultado.
Pero ahà entramos en el terreno de restarle mérito a Baltimore y a eludir responsabilidad propia. Eso no. No hay tiempo de hipótesis sobre lo que pudo ser. La NFL no espera a nadie y Herbert continuarå confiando en su cuerpo de receptores dåndoles la oportunidad de hacer jugadas ganadoras.
"Mantenerse conectados. Es fåcil mantenerse conectados después de una victoria, pero debemos mantenernos conectados después de quedarnos cortos," Henley dijo. "Sabemos que tenemos una temporada larga y que este partido no nos define. Estamos tratando de llegar mås lejos que un partido."
Todo esto es crecimiento para un equipo que continĂșa en claro control de su destino y que tiene ante los Falcons precisamente eso, la chance de volver a la senda del triunfo.
El tercer Harbaugh Bowl volviĂł a ser para John, pero los hermanos volverĂĄn a encontrarse. Y de ser este año seguramente habrĂa que ir a visitar al hermano mayor en la casa de los Ravens, ya en los playoffs.
Me quedo con el anĂĄlisis de quien mĂĄs sabe sobre la clase de hombres y de jugadores que hay en ese vestidor, el entrenador en jefe Jim Harbaugh:
"Nos reagruparemos. Ellos jugaron mejor que nosotros esta noche," dijo Harbaugh. "Pero lo mås importante es que sabemos qué tipo de equipo somos y de lo que somos capaces."
La oportunidad de responder estĂĄ a cinco dĂas.













